viernes, 18 de septiembre de 2009

Y .


Después de tanto, tanto tiempo...

Me siento como un mendigo mudo, que necesita de tu caridad para seguir viviendo pero que no puede expresar todo lo que quisiera, porque un Dios juguetón se lo puso difícil haciendo un nudo eterno en su garganta.

Me siento como una mariposa de colores vivos en una foto en blanco y negro… Sé que soy distinto, sé que no soy lo que muchos han querido que fuera, pero no por ello soy peor que los demás, y eso lo he aprendido mientras me curaba las heridas que muchos me han hecho a lo largo de este tiempo.

Mirándolo bien, soy como un ángel al que le están creciendo de repente unos cuernos y un rabo… Vale, quizás no sepa quién soy, quizás no sepa dónde voy, pero lo que sí sé es que sea quien sea y vaya donde vaya, quiero estar contigo, y todo lo demás para mí está de más.

Y ahora abre tus ojos y déjame ver el mundo a través de ellos, déjame columpiarme en tus pestañas como cuando era un niño… porque por mucho que te resistas y aunque todavía no te hayas dado cuenta, tú y yo somos como dos líneas paralelas condenadas a romperse en un mismo punto el día menos pensado.

¿Necesitas tiempo? Yo tengo todo el tiempo del mundo, desde el día en que me dejaste tirado en aquella acera, rompí mi reloj contra la primera pared que encontré a mi paso mientras vagaba por aquellos callejones oscuros. Y cuando ya estaba a punto de tirar la toalla, cuando estaba a punto de dejarme caer hasta lo más profundo de aquel precipicio infinito… se me ocurrió juntar tres veces mis “chapines de rubí” y repetir: “se está mejor contigo que en ningún sitio” y fue entonces cuando busqué una chispa de luz que me indicara el camino de baldosas amarillas que antes o después me llevará hasta ti.

¿Necesitas espacio? Yo te ofrezco todo el espacio del mundo, de mi mundo, que antes era un lugar inmenso, lleno de luz y color y que ahora se ha reducido a estas cuatro paredes que me aprisionan y que me inundan los pulmones de soledad cada vez que respiro.

Yo soy la puerta que se cierra, tú la ventana que se abre, yo soy aquel que siempre cae por el mismo agujero oscuro y tú mi clavo ardiendo al que agarrarme para no seguir cayendo. Yo soy la clave de sol y tú la nota en forma de silencio de blanca que me ayuda a respirar para poder seguir adelante… Yo Soy Yo… Yo Soy… Yo…Y… .

By Zoldar


P.D: Han pasado ya tres meses desde la última entrada que hice en este blog… Por motivos de tiempo, de trabajo y de no tener Internet a mano, no he podido entrar a vuestros blogs durante bastante tiempo así que… sé que me he perdido muchas cosas, pero bueno, en pocos días me pondré a punto para continuar, gracias a todos por seguir ahí y lo siento por vosotros pero tendréis que seguir aguantándome un tiempo más.